Elegir un tipo de software para nuestro negocio es un gran reto, por ello debemos tener en cuenta nuestras necesidades, requerimientos y objetivos a corto, mediano y largo plazo para no perder oportunidades.
Es así que te encontrarás estas 3 opciones, que explicaremos aquí: software como servicio (SaaS), software de código abierto y software on-premises.
El SaaS es un tipo de cloud computing que ofrece a los usuarios finales una aplicación de nube junto con toda una estructura de TI y plataformas subyacentes a través de un navegador de Internet.
La implementación de un software como servicio permite reducir los costos iniciales de los usuarios, esto ocurre porque no es necesario adquirir sistemas de software de forma permanente ni invertir en una estructura de TI sólida y local.
A pesar de ello, se recomienda a los clientes, que adquieren un software como servicio, que inviertan en sistemas de software de red rápidos, ya que el rendimiento depende de la velocidad de conexión a internet.
Algunos ejemplos de proveedores de SaaS son:
En general, los proveedores de sistemas de software eligen uno de estos dos modelos comunes de implementación o ambos, puede ser su propio centro de datos o un proveedor de servicios de nube pública como AWS, Azure o IBM Cloud.
Las aplicaciones de SaaS aprovechan la arquitectura multiempresa para aislar los datos del cliente, en cambio el proveedor de SaaS se encarga de las actualizaciones del software, corrección de errores y otras tareas generales de mantenimiento.
Con el SaaS tendrás acceso a aplicaciones empresariales como ERP y CRM, las cuales están al alcance de las organizaciones que no cuentan con los recursos para comprar, implementar y administrar la infraestructura y el software.
Puedes ahorrar dinero porque el servicio SaaS permite escalar y reducir verticalmente los recursos en función a su nivel de uso.
Los usuarios pueden ejecutar la mayoría de aplicaciones SaaS directamente desde un explorador web sin la necesidad de descargar e instalar ningún software.
Con un servicio SaaS podrás acceder a tus aplicaciones y base de datos desde cualquier equipo o dispositivo conectado a internet, no tienes que preocuparte por la seguridad de tu información ya que el proveedor se encarga de garantizar tu seguridad de datos.
El software de open source es un código diseñado de manera accesible al público, es decir que todos pueden ver, modificar y distribuir el código de la forma que consideren conveniente.
Este tipo de software se desarrolla de manera descentralizada y colaborativa, así que depende de la revisión entre compañeros y la producción de la comunidad, suele ser más económico, flexible y duradero.
Entre los software de código abierto más conocidos podemos encontrar:
Como cualquiera puede acceder el código fuente también tienes la capacidad de influenciar en su desarrollo, no es necesario un proveedor que desarrolle los productos o determinadas características a medida.
Tienes la capacidad de sobrescribir tu propia versión sobre el programa basándonos en el código fuente.
Muchas empresas se fijan en el código abierto por la diferencia de precios con un software de código cerrado, porque no tienen que pagar derechos por la licencia por el código fuente.
Sin embargo, no todas las organizaciones necesitan solo el código fuente, es necesario pagarle a un proveedor para que haga el desarrollo y personalización del sistema.
Una de las características más atractivas es la amplia gama de aplicaciones debido a que todos los usuarios pueden construir sobre el código fuente te ofrece un gran número de extras, al poder adquirir aplicaciones de varias empresas o particulares.
Al contar con un sistema de código abierto una empresa no tiene dependencia de un proveedor, ya que no es obligatorio comprar todos los productos y servicios con el mismo proveedor.
Incluso si su empresa quiere abandonar absolutamente el proveedor, sólo suspende el servicio y puede seguir trabajando con el código fuente y los datos de la empresa se conservarán en el sistema.
El término “on-premises” significa en español “ en las instalaciones propias”, esto se refiere a la utilización de servidores y entorno informático propios de la empresa.
Cuando una empresa elige este modelo de software, el cliente alquila en calidad de titular de licencia, un software basado en servidor que se instala en un servidor propio o alquilado.
Al contrario de un software en la nube, los clientes de on-premises obtienen todo el control de los datos y también asumen todos los riesgos bajo su responsabilidad. La utilización del hardware del proveedor queda excluida en los servicios on-premises.
No obstante, los titulares de la licencia, no solo asumen la responsabilidad de los riesgos sino también los costos que se generan a partir de la utilización del software. Entre ellos se encuentra la tasa de mantenimiento, los costes del funcionamiento del hardware y software.
El titular de la licencia obtiene el control absoluto sobre todos los datos y decide qué personas tienen acceso a ellos. La utilización de recursos internos y el funcionamiento del software es también responsabilidad del cliente.
Con el modelo de software on-premises, el titular de la licencia conserva todos sus datos en su propio centro de datos, por lo que no se permite el acceso a terceros.
El cumplimiento de las disposiciones legales en torno a la protección de datos es más sencillo, puesto que los servidores en la nube suelen estar en países con otras directivas de protección de datos.
Con on-premises, el titular de la licencia abona un precio único por la compra y la utilización ilimitada del software. No obstante, los costes de inversión son correspondientemente más elevados que en los modelos de suscripción.
El titular de la licencia no depende de terceros proveedores ni del proveedor de la licencia. El acceso a los datos está siempre garantizado, incluso sin acceso a internet.
El software basado en licencia se puede integrar con mayor profundidad en la infraestructura propia y vincular con otros programas.
Ya que ahora conoces los 3 tipos de software que puedes elegir para tu negocio es momento de que analices cuál te conviene más y se adecua a tus necesidades.
Si tienes alguna duda adicional, nuestro equipo de expertos se encuentran listos para ayudarte, solo agenda una cita en el siguiente banner.